Imagen extraida de: http://www.conmishijos.com/ninos/ocio
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La última temática objeto de ánalisis y desarrollo que trabajaremos en nuestros seminarios del prácticum, es la que nos ocupa esta semana; "el aprovechamiento del recreo (juego libre o dirigido). Antes de comenzar a debatir sobre que es mejor si el juego libre o el juego dirigido durante el tiempo de recreo, creo que es conveniente ver algunas definiciones sobre qué es el juego.
- Según Gimeno y Pérez (1989) el juego es un conjunto de actividades a través del cual el individuo proyecta sus emociones y deseos a través del lenguaje (oral y simbólico) manifiesta su personalidad.
- Millán, citado por wallon (1984), lo define como "una actividad generadora de placer que no se realiza con una finalidad exterior a ella, sino por sí misma".
- Según Huizinga en su libro "Homo Ludens", citado por Hill (1976), dice: " el juego es una actividad u ocupación voluntaria que se realiza dentro de ciertos límites establecidos de espacio y tiempo, atendiendo a reglas libremente aceptadas, pero incondicionalmente seguidas, que tienen su objetivo en sí mismo y se acompaña de un sentido de tensión y algegría".
Por todo ello podemos decir que el juego es una actividad placentera, libre y espontánea que aunque no tenga un determinado fin a través de ella el niño puede aprender, ayuda a su desarrollo y también a su socialización.
La gran importancia de esta actividad queda reconocida en la Declaración de los Derechos del Niño, adoptados por la Asamblea de la ONU el 30 de noviembre de 1959, en el principio 7: "El niño debera disfrutar plenamente de juegos y recreaciones; la sociedad y las autoridades públicas se esforzarán por promover el goce de este derecho".
En la Educación Infantil el juego tiene un papel muy importante, ya que es imprescindible en la estruccturación del yo, permite conocer el mundo que le rodea y adaptarse a él, enriquece la imaginación, desarrolla la comprensión, ayuda a la socialización temprana y entre otras cosas también al desarrollo de la comunicación, tanto verbal como física.
Una vez definido que es el juego y vista la gran importancia que tiene en esta etapa de la educación, es conveniente reflexionar sobre que tipo de juego es mejor para utilizar durante el recreo, si el libre o el dirigido.
Bajo mi punto de vista los docentes nos pasamos toda la jornada escolar diciendo a los alumnos que es lo que deben hacer, como tienen que actuar y marcandole las rutinas a seguir, por ello creo que lo más recomendable para el recreo es dejar que jueguen libremente, ya que es el momento del día en el que pueden actuar libremente después de tantas imposiciones, es el momento en el que se sentirán realmente niños y del que disfrutarán a su manera.
Para mi el juego dirigido no es más ni menos válido que el libre, pero creo que su utilización es más recomendable para las sesiones de psicomotricidad, en esas sesiones si queremos que los niños conozcan juegos tradicionales, como jugar en grupo o algún juego que veamos de especial interés es la ocasión oportuna y creo que es como se deben de utilizar.
Los alumnos desde su autonómia pueden poner en práctica durante el recreo los juegos enseñados en esas sesiones y en clase, si lo desean y si no, harán aquello que les parezca mejor o más conveniente.
Durante el recreo creo que el papel del docente debe de ser en parte de "vigilante" para solucionar las incidencias que se dan pero también de "observador" para ver que es lo que hacen los niños/as cuándo se les da la autonomía y la libertad de actuar por ellos mismos, como se relacionan, si su actitud y su carácter es el mismo en clase que fuera...
Como he dicho antes no veo el juego dirigido como algo negativo, y por eso también he de decir, que en momentos puntuales, si vemos alguna situación que requieran un poco de nuestra ayuda, cómo ,por ejempo, si vemos que un niño no se relaciona nunca con otros niños, que siempre está sólo, podemos intervenir, y mostrar algún juego facilitandole la tarea de socializarse con otros niños, pero no tenerlo como rutina, ni como algo establecido, sólo para ocasiones excepcionales y puntulizadas en el tiempo no repetitivas.
En mi colegio el patio al que los niños salen cuenta con algunos medios materiales como ruedas, motos, algunos columpios, casitas y algunos árboles.
Los niños de cuatro años salen junto con los de cinco, algo que me parece bueno, ya que así comienzan a socializarse los niños de distinta edad.
Algunos de los juegos que se pueden observar al verlos jugar son: las peleas (sobre todo por parte de los niños), jugar a papás y mamás, jugar a las casitas, jugar con las motos, con los columpios y en algunas ocasiones también se ve algún que otro juego tradicional como "el pilla pilla", "el corro de la patata".
Los días en los que no se puede salir al patio por alguna razón como la lluvia, los niños se quedan en clase y o bien juegan con los juguetes del aula o se juntan por clases del mismo nivel para ver alguna película.
En conclusión creo que la mejor forma de aprovechar el recreo es dejar jugar a los niños libremente y dejar que disfruten a su manera, para que puedan aprender y desarrollarse de forma autónoma.
BIBLIOGRAFÍA:
GARVEY, C.(1983) "Qué es el juego infantil" en El juego infantil, Madrid, Morata